ULIG es una obra profundamente poética y filosófica, estructurada como un extenso monólogo existencial. En ella, el narrador —una figura solitaria, marginada y posiblemente simbólica— reflexiona sobre la caída del ser humano, el exilio espiritual, la culpa, la conciencia fragmentada, y una constante búsqueda de redención. El texto está lleno de imágenes potentes: montañas azules, espejos, cadáveres, dioses invisibles, sombras y estrellas. Es un descenso místico y angustiado hacia el fondo del alma humana, pero también una tentativa de regeneración y resurrección interior.
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